La gorda y el niño con vulva

Yo tenía ocho años cuando supe que era gorda. Hasta entonces no lo había imaginado siquiera, y eso que me gustaba mucho mirarme al espejo (porque gorda no era, pero presumida sí). Mi profesora de primaria propuso hacer un ejercicio que venía en el libro, teníamos que contestar uno a uno, en voz alta, la siguiente pregunta: “¿Eres grueso o delgado?”.

Globalización sí, pero no en mi casa

Debió sentirse aturdido algún día y desde entonces raramente encendía la tele. Decía que él no necesitaba saber qué pasaba más allá de su ciudad, que la globalización informativa era una locura que no servía para nada. No recuerdo mucho (más bien nada) de las lecciones de aquel profesor de literatura, pero aquellas cuestiones lanzadas…

Ética etílica: Viva el vino y los «Pechotes»

La historia del pequeño Nicolás es uno de esos diamantes en bruto que cualquier periodista aspirante a Truman Capote está deseando cazar. Recordemos que, normalmente las noticias diarias no dan para mucho espectáculo, y un acontecimiento de este tipo justifica el delirio padre y el desmelene periodístico. Cuando ya tenemos al personaje principal Fran, al…